El viernes 9 de abril el pastor Gerardo Salinas fue convocado a la Casa del Padre. Ahora goza de la presencia del Señor, culminando así una vida entregada al Evangelio.
Cristiano desde que tuvo la edad para discernir, el pastor Salinas fue un hombre apasionado por la Palabra de Dios, y tan pronto como recibió el llamado al pastorado, fue puesto por el Señor en Yuriria Guanajuato, México, una ciudad en donde, en ese momento, no había evangelio.
Gerardo Salinas tenía planes para una ciudad más grande, sin embargo el Señor le insistió en que debía ser Yuriria el lugar donde debía desarrollar su ministerio. Aceptando por obediencia el designio de Dios para su pastorado, comenzó a trabajar en una pequeña iglesia con las dificultades que implica difundir el Evangelio en una población apegada a la religiosidad y sus tradiciones.
Sin embargo, pronto el pastor Salinas comenzó a ver los resultados de sus esfuerzos y la iglesia creció, su ministerio comenzó a impactar cada vez más a la ciudad, y más tarde, el Señor puso en el corazón del pastor la iniciativa de realizar uno de los congresos más importantes del Bajío: el Congreso Pentecostés.
Pentecostés es un congreso de perfil internacional a donde asisten tanto conferencistas como expositores y asistentes de varios países y sumados los eventos que realiza, han congregado a más de dos mil personas.
Pero el pastor Salinas no sólo luchó por el evangelio, también fue partidario de la unidad de la iglesia y participó en la alianza que une a los pastores de Moroleón, Uriangato y Yuriria, en calidad de secretario.
Precisamente en su calidad de representante del Consejo de Ministros Unidos del Sur de Guanajuato participó en el congreso anual Guanajuato 2000, en donde oró por las autoridades administrativas con el propósito de romper con la maldición de la corrupción.
Los tres últimos años fueron de especial intensidad para el pastor Salinas, pues realizó varios viajes a Estados Unidos, Latino América y en el interior de México, llevando la Palabra de Dios.
Ejemplar esposo y padre de familia, el pastor Salinas también se preocupó por la unidad de la familia y la consolidación del matrimonio, fue autor de varios libros dedicados a la familia, el matrimonio y el liderazgo.
Su fallecimiento ha despertado múltiples reacciones en redes sociales, lamentando su muerte y alegrándose porque ahora el pastor ha recibido su máximo goce: estar en presencia del Señor.
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Agradecemos al pastor Miguel Ángel Reyes, de Moroleón, Guanajuato, por su apoyo en esta nota informativa.
