La razón de la música cristiana es el Evangelio, dijo Héctor Normando

Cuando un pueblo está más necesitado en lo material es cuando más alaba a Dios, dijo también el salmista chileno.

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La música atrapa y produce cosas importantes en todas las personas porque el lenguaje musical es universal, sin embargo el efecto es más poderoso cuando la música viene de la mano de alguien que le debe todo a nuestro Señor Jesucristo, dijo Héctor Normando, salmista chileno quien estuvo presente en el evento Pentecostés de Yuriria Guanajuato. 

Luego de haber subido al estrado en que presentó hermosas y alegres piezas musicales con que alabó a nuestro Señor, Héctor Normando expresó en entrevista con Eco Cristiano que la razón fundamental de la música cristiana está en el Evangelio. Abundando sobre el tema el salmista afirmó que predicar a través de la música es algo que llega muy hondo en el corazón de los fieles. 

Héctor Normando, quien vive al sur de Carolina, en Estados Unidos, se dedica a producir música cristiana en ese país y viaja por todo el mundo tocando la guitarra dentro del flamenco, género musical que ha enriquecido con temas cristianos.

Sobre el acogimiento de la música cristiana en México Héctor Normando considera que cuando un pueblo está más necesitado en lo material es cuando más alaba a Dios, a diferencia de Estados Unidos donde hay mayor abundancia y como consecuencia de ello las prioridades son otras.

Héctor Normando, salmista chileno radicado en Estados Unidos, en concierto de alabanza en el evento Pentecostés de Yuriria Guanajuato.

Acá en México es muy importante la forma en que la gente te recibe, aunque uno no espere nada el mejor pago es el cariño, el amor con el que te reciben. La cara de un país es la gente que te recibe en migración. Yo cuando descendí acá era increíble como te recibe la gente, lo dadivosos y amables que son. Lamentablemente la gente que emigró de aquí para Estados Unidos ha cambiado en eso y yo les digo que no se olviden de dónde Dios los sacó, han cambiado su forma de ser, su forma de hablar, y ya no van a la iglesia quizá porque ya les molesta.

Normando observa que en México hay lugares en donde el evangelio aún no germina lo suficiente, por ejemplo en el Bajío la presencia del evangelio aún es mínima, pero lo ve como parte de un proceso, y puso un ejemplo para comprenderlo mejor: “cuando descendía el avión, vi que hay lugares que están verdes y hay otros que están más secos, eso tiene un por qué, tiene un propósito, va a llegar un momento en que va a dar fruto pero no obstante hay que seguir labrando la tierra para que dé buen fruto”.