En la iglesia hay un segmento asignado para adorar. La gente levanta la mano, cierra los ojos y canta lo más fuerte que puede. Las Escrituras nos ordenan alabar a Dios: “Que todo lo que respira alabe al SEÑOR” (Sal. 150:6, NVI ).
Entonces, veamos cuatro cosas que produce tu alabanza a Dios:
1. La alabanza le da a Dios un trono para sentarse
Puedes pensar que tu alabanza no va más allá de las paredes, pero cuando adoramos “en espíritu y en verdad”, nuestra alabanza es el lugar donde Dios está entronizado. Lea Salmo 22:3 y Juan 4:24.
2. La alabanza confunde al diablo
Vemos en Jueces 7:22 y 2 Crónicas 20:22 que cuando el pueblo de Dios decidió alabar con trompetas y cánticos, fue un arma poderosa contra el enemigo.
Esto puede ser cierto en tu vida. Vence al diablo confundiéndolo alabando a Dios a pesar de tus sentimientos y circunstancias.
3. La alabanza protege nuestro corazón.
Pablo y Silas enfrentaron pruebas, pero en lugar de permitir que el enemigo influyera en sus corazones, decidieron alabar a Dios mientras estaban en la cárcel (Hechos 16:26). La alabanza les recordaba la bondad de Dios y conducía a la intervención divina. Puedes seguir su ejemplo.
El Salmo 37:3 nos dice que nos alimentemos de la fidelidad de Dios en momentos de dificultad para proteger nuestro corazón de las asechanzas del diablo.
4. La alabanza nos da una nueva perspectiva.
Lee Juan 6:11 y Juan 11:41 para ver que la gratitud ajusta la actitud y la actitud ajusta la altitud. La actitud es la respuesta a las personas y situaciones basada en las creencias, valores y suposiciones que uno tiene.
El diez por ciento de la vida es cómo la haces, mientras que el 90% de la vida es cómo la tomas. Aprende a usar el poder de la alabanza para derrotar los planes del enemigo en tu contra.
¡La gloria sea siempre para Dios!
Fuente: Charisma Magazine
Autor: Vladimir Savchuk. Lidera el movimiento HungryGen y pastorea una iglesia multicultural con una visión clara y enfocada para ver la salvación de las almas, la sanación, la liberación y la formación de líderes jóvenes. Dirige la conferencia anual Raised to Deliver, que atrae a miles de personas de todo el mundo. Lidera tres pasantías diferentes. Es un orador solicitado en conferencias y campamentos.
