Con la Casa Blanca como sede y el Presidente Donald Trump como anfitrión, Israel, Emiratos Árabes Unidos y Bahrein firmaron el restablecimiento de relaciones diplomáticas, en un acto que el presidente estadounidense calificó como un “amanecer de un nuevo Medio Oriente”.
Desde la fundación del Estado de Israel en 1948, este país sólo había logrado establecer relaciones diplomáticas con dos países árabes: Egipto en 1979 y Jordania en 1994. Tuvieron que pasar 26 años para que Israel alcanzara acuerdos con más países árabes.
Emiratos Árabes Unidos y Bahrein se convirtieron en el tercer y cuarto país árabe en restablecer relaciones diplomáticas con Israel. La firma fue vista, sin embargo, con escepticismo por Palestina.
El documento estuvo suscrito por Benjamín Netanyahu, primer ministro de Israel, Abdullah bin Zayed, Ministro de Relaciones Exteriores de EAU, por Abdullatif Al Zayani, Ministro de Relaciones Exteriores de Bahrein, y por el presidente Donald Trump como testigo.
El presidente estadounidense comentó que tras esta histórica firma, otros cinco o siete países árabes firmarán acuerdos similares con Israel, entre los cuales espera que se encuentre Arabia Saudita.
Escepticismo Palestino
La firma del acuerdo ha causado, sin embargo, por lo menos escepticismo en la población palestina, pues se afirma que esos pactos son una traición a la causa de la Autoridad Nacional Palestina y un golpe a la solidaridad entre países árabes.
Para Mahmud Abás, presidente de Palestina, la firma del acuerdo diplomático no basta para traer la paz a Medio Oriente, la cual sólo puede ser garantizada tras la retirada israelí de los territorios ocupados en Palestina.
El acuerdo entre Emiratos Árabes Unidos e Israel estuvo condicionado a que Israel suspendiera la anexión del territorio ocupado en Palestina, específicamente en Cisjordania, sin embargo, no se especifica por cuánto tiempo se suspende la anexión.
Todo parece indicar que la suspensión de la anexión sólo será temporal, pues para Israel anexar ese territorio a su país, significa recuperar una tierra ancestral del pueblo judío.
Al mismo tiempo que se firmaban los acuerdos en la Casa Blanca, como una muestra de que el conflicto palestino-israelí va a continuar, militantes palestinos dispararon cohetes contra Israel desde la Franja de Gaza, controlada por el grupo Hamas.