El pasado viernes por la noche la iglesia Comunidad Espíritu de Dios de Yuriria Guanajuato sufrió un atentado que provocó un incendio parcial del templo, casi todos los vidrios de las ventanas rotos y biblias y muebles quemados. Por la gracia de Dios, en ese momento no había ninguna persona en el templo.
El pastor de la iglesia, Gerardo Salinas, comunicó a través de sus redes sociales que hasta el momento no se conoce el motivo de la agresión ni quiénes lo hicieron, sin embargo, con la voz cortada, reconoció que Dios los ha respaldado y las cosas no han pasado a mayores consecuencias.
Conmovido agradeció a la congregación por las muestras de apoyo ante la agresión, pues ha sido juntos como han salido adelante en la iglesia Comunidad Espíritu de Dios de Yuriria del Estado de Guanajuato, una de las entidades que más han sufrido las consecuencias del crimen organizado en el país.
El pastor Salinas reconoció, sin embargo, que no se descarta que éste no haya sido un caso aislado y que las agresiones pueden continuar, sin embargo, dijo el pastor, “esto no nos detiene sino que nos motiva a seguir predicando el evangelio”.
“El enemigo ha logrado dañar el corazón de las personas, por lo que hay una necesidad urgente de predicar el evangelio”, dijo el pastor, y agradeció a la congregación por todo el apoyo y las muestras de afecto.
La noche del viernes, cuando el pastor fue avisado que las alarmas del templo se habían activado, inmediatamente se dirigió al lugar y al llegar se encontró ya con el cuerpo de seguridad pública intentando entrar porque había fuego en el interior. Al entrar se encontraron con tal cantidad de fuego y humo que no se podía respirar, pero entre todos lograron controlarlo.
Gracias a Dios el pastor, los miembros de la iglesia y elementos de seguridad pública llegaron a tiempo para que el fuego no alcanzara a la plataforma principal, pues de ser así el daño hubiera sino muy fuerte. Lejos de debilitar a la iglesia, este hecho “nos ha fortalecido más y la iglesia se ha unido para orar, para ayunar y para buscar más de la presencia de Dios”, dijo el pastor.
Como el templo fue dañado sólo parcialmente, se aisló la parte dañada para que continúen los peritajes y el resto se habilitó para el servicio de este domingo, el cual se realizó de manera regular y con la asistencia de la congregación.
Por las mismas redes sociales y llamadas telefónicas, la comunidad cristiana y simpatizantes de la iglesia y el pastor manifestaron su solidaridad y respaldo para seguir adelante en la predicación del Evangelio.