Sin importar lo difíciles que sean las circunstancias que estemos viviendo, Dios nos ayudará cuando lo invoquemos, dijo el pastor Armando Alducin en una reflexión derivada de los dos primeros versos del Salmo 40:
Pacientemente esperé a Jehová, Y se inclinó a mí, y oyó mi clamor. Y me hizo sacar del pozo de la desesperación, del lodo cenagoso; Puso mis pies sobre peña, y enderezó mis pasos.
El pastor y fundador de Vida Nueva para el Mundo expresó en redes sociales que estos versos “revelan la maravillosa fidelidad de Dios, como respuesta a la espera obediente de David, cuando clamó pidiendo ayuda”.
En seguida el Pastor Alducin expone el valor y significado que tienen para nosotros los versos referidos: son un “ejemplo de la confianza que debemos poner en Nuestro Padre: David sabía que, sin condiciones, podría acudir al Señor para que lo librara; tenía en Él la certeza de atravesar sin contratiempos esa tormenta”.
Finalmente Armando Alducin traslada a nuestras vidas la revelación de la mencionada cita bíblica: ”No importa lo desafiante de las circunstancias, Dios también nos ayudará cuando lo invoquemos. A veces, interviene en forma directa, pero lo más habitual es que lo haga a través de otras personas. Cuando reconocemos nuestra necesidad ante Él (y quizá ante otros), y cuando demostramos nuestra plena confianza en su poder, podemos estar seguros de que responderá a nosotros con su grandiosa fidelidad”