Entrevistado en el marco de la cúmbre misionera de COMIMEX 2018: Saúl García nos habla de la experiencia misionera, analiza además la respuesta al llamado misionero en México y explica las razones por las que ahora es misionero en la India, en una región que por razones de seguridad no podemos revelar. En seguida presentamos la entrevista realizada por Eco Cristiano Digital (ECD) a Saúl García León (SGL).
ECD: ¿Cómo es la experiencia de ser misionero?
SGL: La vida misionera es la experiencia más hermosa que un ser humano pueda tener, es la experiencia de saber que uno puede ser útil para llevar a Jesús a aquellos que claman por salvación. Es una vida apasionada, emocionante, llena de sorpresas. Como misioneros nos toca ver en primera fila lo que Dios es capaz de hacer en culturas distintas al mundo que conocemos. Es muy distinto en religiones, en idiosincracias, y en cada una de esas facetas Dios es un Dios sorprendente que se glorifica y se manifiesta, que llega al corazón necesitado.
La vida misionera es ver vidas restauradas, ver vidas cambiadas y sociedades transformadas por el poder de Dios.
ECD: Desde su punto de vista, ¿la iglesia en México ha respondido al llamado de ser misionero?
SGL: Desde hace algún tiempo en México la iglesia ha comenzado a oír acerca de la necesidad de ser misioneros o hacer misiones, porque todos tenemos la capacidad para involucrarnos en las misiones, pero venimos arrastrando una falta de información y de formación que nos ayude a captar el compromiso que tenemos de predicar el evangelio, no solo a los que viven en nuestro entorno sino en el mundo entero.
La iglesia en este momento se encuentra en un despertar y rogamos que ese despertar sea latente, en aumento y que pueda hacerse una plena conciencia de que el mundo necesita de Cristo Jesús.
ECD: ¿Pero qué hay del llamado a ser misionero en otras culturas, en países lejanos?
SGL: Dios produce en nosotros tanto el querer como el hacer. Puede ser que en alguien se repita el caso de Nehemias que escuchó y quiso regresar a restaurar los muros, pero también puede ser que alguien sienta en su corazón una inclinación para servir a Dios en otros países donde no le conocen. En todos los casos el ser humano es más que capaz de predicar el evengelio siempre y cuando tenga a Cristo como su salvador. Si lo hace en otras culturas, traspasando las fronteras, necesitará información y formación para que esté más capacitado y listo para enfrentar todos los embates que representa la obra misionera.
La obra de predicar el evangelio es en general y para todos, pero hay una diferencia entre compartir el evangelio con los de nuestra propia lengua y hacer la obra misionera traspasando las barreras culturales, sociales, lingüísticas y de usos y costumbres.
ECD: ¿Igual se requieren misioneros en méxico?
SGL: En México tenemos un incremento vertiginoso de la criminalidad y también hay personas que están cada vez más reacios a escuchar del evangelio, y eso probablemente sucede porque la iglesia ha decidido cerrar su boca y vivir la experiencia espiritual de cada domingo en cada reunión.
En México tenemos 120 millones de habitantes y entre ellos hay 16 millones de indígenas, de los cuales más de 300 grupos de indígenas están disgregados en toda la republica mexicana y muchos de ellos no han escuchado de Cristo Jesús. En México tenemos 26 grupos que aún no tienen ninguna sola iglesia, ni un solo Cristiano, ni un solo misionero. Ahí hay una necesidad de misioneros en México.
ECD: ¿Hay necesidad de misioneros en regiones no indígenas?
SGL: Claro, tenemos el Círculo del Silencio que se encuentra en el centro del país, donde la presencia evangélica es casi nula. Necesitamos evangelizar y plantar iglesias ahí.
ECD: Aunque parece obvio, háblenos de la necesidad de misioneros en países lejanos.
SGL: Hay 36% de la población mundial que aún no ha sido alcanzada y no conocen de Cristo Jesús, especialmente aquellos países que están más lejanos, con un fuerte hermetismo religioso y para eso necesitamos misioneros con llamado, que sepan que es Dios quien los está llamando para predicar el evangelio.
ECD: Usted es un misionero en la India. ¿Por qué Asia?
SGL: Porque así lo decidió Dios. Yo estaba comprometido con mi país hasta que Dios en oración me dijo que quería que le sirviera en Asia. Yo pregunté a Dios: ¿Por qué en Asia y no en México? Entonces Él me pidió que abriera Éxodo 3,9, y leí el pasaje donde Dios a través de Moisés dice que había escuchado el clamor de su pueblo y también había visto la opresión con que los egípcios lo oprimían. Dios me dijo entonces, ellos están clamando por salvación. Y acepté el reto de Dios.
Pero es Asia tambien, porque ahí es donde han sucedido y siguen sucediendo los cambios y los adelantos más importantes que han impactado a todo el mundo. Es en Asia donde está el pueblo de Dios. Es en Asia donde Dios decidió que su hijo naciera. Es en Asia donde Dios decidió que su Palabra se escribiera en tres idiomas asiáticos. Es en Asia donde vive la mayor parte de la población del mundo. Es en Asia donde está el mayor número de religiones que han impactado al mundo entero. Es en Asia donde están los filósofos más reconocidos de todo el mundo. Es en Asia donde han nacido y crecido los gurús más importantes del mundo. Es en Asia donde se fundó la primera universidad del mundo. Es en Asia donde desde los tiempos ancestrales se educa a todo el mundo. Por eso es que Asia es importante y necesita del evangelio. Pero tristemente una buena cantidad de envíos de misioneros no llega a Asia. En Asia se necesitan miles de misioneros que decidan entregar su vida por completo para predicar a Cristo Jesús.